"No hay plata": ex banqueros centrales y economistas alertan por el delicado balance de las cuentas fiscales

Coinciden con el exministro de Hacienda Ignacio Briones

"No hay plata": ex banqueros centrales y economistas alertan por el delicado balance de las cuentas fiscales

Un espacio de gasto para los próximos años "extremadamente reducido", alta carga tributaria y pasivos contingentes suman inquietudes de los expertos. Hoy el CFA actualizará su visión de las finanzas públicas.

Una mirada compartida tuvieron ex banqueros centrales y economistas sobre las alertas que realizó el exministro de Hacienda Ignacio Briones, quien levantó una señal de preocupación sobre la delicada situación de las cuentas fiscales y el nulo espacio de gasto adicional. "No hay plata. No nos pasemos películas, no discutamos proyectos ni ofrezcamos a la ciudadanía cuestiones que son espejismos. Sinceremos la realidad", dijo Briones ayer en entrevista con "El Mercurio".

La advertencia del académico de la UAI se suma al diagnóstico del Consejo Fiscal Autónomo (CFA), que en enero constató un deterioro de las finanzas estatales en 2023, al cerrar con un déficit de 2,6% del PIB desde el 0,2% de superávit de 2022. También enfatizó que no existen espacios para nuevos gastos permanentes en los próximos años si no se aumentan las fuentes de financiamiento permanentes. Hoy el CFA expondrá en el Congreso una actualización sobre su visión de la situación fiscal.

En la misma señal

El expresidente del Banco Central Vittorio Corbo se sumó al llamado de alerta. "El exministro Ignacio Briones describe una gran realidad. Al igual que lo ha señalado el Consejo Fiscal Autónomo, la sostenibilidad fiscal se ha debilitado en los últimos años con la aprobación de gastos permanentes que no se condicen con las proyecciones de ingresos permanentes, resultando en un aumento importante en la deuda pública a PIB. En particular, para cumplir con la trayectoria de balance estructural planteada por el Gobierno, el espacio fiscal para los próximos años es extremadamente reducido", describe Corbo.

El ex banquero central también puso el foco en la alta carga tributaria del país. "Las numerosas reformas tributarias de los últimos 15 años no solo no han recaudado lo que se proyectaba, sino que también han resultado en un impuesto a las empresas muy por encima del nivel promedio de la OCDE, lo que al final desincentiva la inversión, la que también sufre los efectos de la creciente ‘permisología' y del aumento de la inseguridad". Corbo añade que "las alternativas de reformar el Estado, mejorar la eficiencia del gasto público y subir las bajas tasas de impuestos a los ingresos medios no han encontrado piso político".

En la misma línea, Matías Acevedo, quien como director de Presupuestos del segundo gobierno de Sebastián Piñera trabajó con Briones, criticó la idea de condicionar desembolsos permanentes a recaudación tributaria: "Cuando uno gasta más de lo que tiene, no hay plata para financiar gastos permanentes y seguimos prometiendo desembolsos con ingresos permanentes, que no van a llegar, como el impuesto a los superricos. Y como ‘el perro del hortelano' que no come, pero tampoco deja comer, les ponemos freno a los ingresos permanentes estatizando el desarrollo del litio, que tiene bastante más probabilidades de recaudar que el impuesto a las personas y el cumplimiento tributario", dice.

Pacto fiscal y pasivos

También concuerdan con Briones y con las alertas del CFA el exvicepresidente del BC y exministro de Hacienda Manuel Marfán y la directora de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica, Andrea Repetto.

"Coincido que hay una situación fiscal estrecha. De allí la importancia de un acuerdo en el pacto procrecimiento, ex pacto fiscal", señala Marfán.

Sobre las holguras fiscales, Repetto señala: "Sí, coincido (con Briones)... El espacio es probablemente negativo en los años que vienen y no estamos poniendo suficiente atención a los pasivos contingentes del Estado".

El gatillo de la PGU

El coordinador macroeconómico de CLAPES UC, Hermann González, dice que "la única forma de tener mayor espacio de gasto público es con fuentes de financiamiento que generen holguras estructurales y ello puede provenir de un mayor crecimiento tendencial, mayor eficiencia del gasto o de mayor recaudación tributaria permanente". Agrega que "el litio también tiene el potencial de convertirse en una fuente de ingresos estructurales relevante", pero "es importante, como principio, ser prudentes y no comprometer gastos hasta que no se tenga certeza de la disponibilidad de nuevos ingresos estructurales".

Recoge la advertencia de Briones sobre la fórmula del Gobierno para subir la PGU: "La lógica del `gatillo' va en la dirección correcta, pero debe estudiarse con atención su diseño y sus implicancias futuras". 

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